Onika es una oficina enfocada al diseño de joyas elaboradas con piedras naturales originarias de las islas baleares. El objetivo principal de este proyecto era la creación de un espacio de trabajo que combinase diferentes zonas (de trabajo, de descanso, de design thinking, de ocio…) con el fin de desarrollar un espacio lo más agradable posible para los trabajadores.
Su geolocalización ha sido el concepto principal en la elección de materiales y formas, aplicando el uso de la cal que define su arquitectura, el color verde de los olivos, las piedras naturales, la madera de los árboles, el azul de la espuma del mar, y así como sus formas orgánicas.
Está definido por un patio que cruza toda la longitud de la planta a dos alturas, que incorpora vegetación para crear un ambiente más agradable, con la finalidad de proporcionar también un mayor acceso de luz natural en su interior, favoreciendo así las condiciones de trabajo.